Al Barça le cuesta rematar LaLiga ante un buen Girona
Los de Xavi no pasaron del empate en el derbi catalán ante un buen Girona. Aún así aumentan a 13 los puntos que saca al Real Madrid a falta de 10 jornadas para el final
El Barcelona no tiene prisa por ganar LaLiga. Pese a su empate en casa ante el Girona saca 13 puntos al Real Madrid cuando quedan 30 en juego por lo que los de Xavi aún se pueden permitir el lujo de decidir en qué jornada quieren ser campeones. Tiene cuatro partidos de margen sobre su gran rival, el que le privó de jugar una nueva final de Copa del Rey y de poder conseguir un doblete que hubiera sido la guinda perfecta a una temporada en la que han tenido de todo… y lo que les queda por saber. El Girona se convierte en el tercer equipo que puntúa este año en el Camp Nou y el segundo que consigue dejar su puerta a cero después del Rayo. Gran partido de los de Michel, que vieron premiado su atrevimiento.
Xavi sacó un once reconocible en el que lo más novedoso fue que volvió a contar con Eric García de central y le dio una nueva oportunidad como titular a Ansu Fati, buscando que se vuelva a parecer poco a poco al de antes de las lesiones. Enfrente estaba un Girona que juega mejor ante los grandes. Los de Michel, uno de los equipos más goleadores de LaLiga y también de los más goleados, se crecen en esos partidos y, por ejemplo, no merecieron perder en casa ante el Barça o el Atlético, empataron en el Bernabéu y ganaron en San Mamés.
El inicio del partido confirmó el atrevimiento gerundense y antes de los dos minutos Taty Castellanos y Tsygankov se acercaron con peligro a las inmediaciones de Ter Stegen. Los de Michel tienen un toque de balón elegante, trabajado, sacan el balón jugado desde atrás como pocos en LaLiga, pero eso a veces tiene sus riesgos. Y así llegó el primer aviso azulgrana en un remate alto de Lewandowski tras una pérdida de balón de Borja García. Acto seguido fue Ansu Fati quien disparó cruzado con cierto peligro. Sin tiempo para el descanso, una cesión de Santi Bueno hacía atrás sin mirar estuvo a punto de darle un disgusto a Gazzaniga, que evitó el gol en el último instante. Cinco ocasiones en los primeros ocho minutos prometía espectáculo del bueno en el Camp Nou.
En el minuto 10 se volvieron a oír gritos de ¡Messi, Messi…! solicitando su vuelta en lo que es más un deseo de la afición que otra cosa. Los economistas y el resto de la humanidad no lo ven muy viable a no ser que el argentino juegue gratis… El partido mantenía el ritmo de ida y vuelta y Taty Castellanos y Raphinha tuvieron sus opciones de marcar. Con el paso de los minutos bajó algo el ritmo de juego, pero no las ocasiones y el Barça tuvo dos claras para irse con ventaja al descanso, pero Gazzaniga estuvo impecable. Primero con un disparo cercano de Raphinha y después sacando sobre la misma línea un remate de Araujo a la salida de un córner.
Xavi: «No me preocupa Lewandowski, me preocupa ganar LaLiga»
La segunda parte se inició con dos cambios, uno por bando. Borja García, con molestias tras un pisotón de Sergi Roberto, dejó su puesto a Aleix García y en los locales Kessie entró por un flojo Sergi Roberto. Lo que no cambió fueron las ocasiones y Eric García cabeceó mal en buena posición una falta nada más reanudarse el partido. El Girona se adueñó del balón y se llegaron a escuchar algunos pitos en la grada tras una gran jugada de los de Michel que acabó con un gran pase en profundidad de Oriol Romeu que dejó solo a Taty Castellanos ante Ter Stegen pero el remate del argentino dejó mucho que desear y se fue fuera por mucho. Aviso a navegantes de un Girona que no sólo discutía la posesión a los de Xavi, iba a por el partido.
El Barça echaba de menos a su ‘killer’. Lewandowski no es el del inicio del campeonato y el equipo añora los goles del polaco que resolvieron varios partidos parecidos a este antes del Mundial. Ansu Fati tampoco estuvo nada acertado y a falta de 20 minutos fue sustituido por Ferran Torres. Pasaban los minutos y el Girona parecía tener controlado el partido ante un Barça que sólo funcionaba a arreones. Michel demostró su ambición sacando a Riquelme el último cuarto de hora y en su primera acción estuvo a forzar un autogol de Araujo.
Los gerundenses aguantaron el arreón final de los locales -Gavi a la salida de un córner y Lewandowski de tacón lo tuvieron cerca- y mantuvieron su puerta a cero por primera vez fuera de casa esta temporada logrando un merecido punto por su atrevimiento. El Barça no tiene prisa por ganar LaLiga, es cuestión de tiempo.