Blanca Fernández Ochoa, la malograda esquiadora encontrada sin vida en la mañana del miércoles en La Peñota de Cercedilla, confesó en una entrevista hace un año que era en esas montañas donde encontraba la calma. «Me emocionan mis siete picos en Cercedilla -a unos 20 km de La Peñota-. Es mi montaña, mi referente. Es mi lugar de refugio. Me calma. Allí están mis orígenes.

En esta entrevista que publicó nieveaventura.com (la entrevista completa se puede leer aquí la medallista olímpica madrileña Blanca Fernández destilaba lo unido que estaba con su familia. «Recuerdo el día de la medalla ver a mis siete hermanos allí. Me dije, no puedo fallar. Me dieron alas. Fíjate que cerraron las dos tiendas y se vinieron en coche para ir a verme, yo no sabía nada. Me saltaron las lágrimas…. Con las banderas, pancarta. No me lo esperaba», relataba, mientras revelaba su sueño imposible: «Me encantaría volver a esquiar con Paco (risas). Él era mi ídolo y con el que más me he divertido esquiando. Si pudiese… vamos ahora mismo, le llamamos allá arriba y que baje».

Fuente Marca.com