El mes de noviembre estaba marcado en rojo en el calendario para resolver el futuro de Ernesto Valverde en el banquillo azulgrana. El técnico tiene un año más de contrato pero hace falta ratificar esa temporada adicional por las dos partes. La idea de la Directiva es mantener una reunión con el Txingurridurante el próximo parón invernal con el propósito de alcanzar un acuerdo definitivo para su continuidad hasta junio de 2020.
No será el primer contacto entre las dos partes. Miembros de la secretaría técnica vienen hablando con el agente del entrenador desde hace varias semanas. En el club, aunque es cierto que se han producido dudas en algún momento, la intención es mantener el compromiso durante una campaña más.
Valverde ha preferido esperar para ver cómo se desarrollan los acontecimientos, consciente de que en el mundo del fútbol todo cambia de un partido a otro. Sabía que tenía tiempo porque el plazo para decidir si seguía finaliza en 2019. Bartomeu dejó entrever que el entrenador tendría tiempo hasta marzo para pronunciarse.
Sin embargo, en el club no quieren alargar tanto la situación. No desean que Valverde lleve el cartel de provisionalidad y este es el motivo por el que van a intentar que su entrenador se pronuncie de manera definitiva. La secretaría técnica entiende que un acuerdo con el técnico sería beneficioso para que no se siguiera especulando con su continuidad.
En este momento todo hace indicar que las dos partes rubricarán el pacto por una temporada más. La marcha del equipo es excelente. El Barcelona encabeza la clasificación tanto en la Liga como en su grupo de la Champions. En Europa, objetivo prioritario en esta campaña, el equipo ha ofrecido una imagen excelente y nadie duda en estos momentos que es uno de los grandes favoritos para el título.
Las dudas que se produjeron el algunos momentos por los resultados cosechados en Liga, se han disipado por la marcha del equipo en la Champions. Y no hay que olvidar que el equipo ha ofrecido un excelente rendimiento sin Messi, algo que revaloriza la figura de Valverde al frente del equipo.
Otro factor determinante para que el club apueste por la continuidad del entrenador es la relación que mantiene con el vestuario. Las vacas sagradas de la plantilla están con él. La relación con Messi es muy buena, al igual que con el resto de futbolistas aunque siempre están los casos especiales de aquellos que no juegan de manera habitual. Pero el grupo principal está con el Txingurri, un argumento de peso de cara a su continuidad.
Queda por ver cuál es la respuesta del entrenador. En el club son optimistas después de las conversaciones que han mantenido con su agente. La fluidez de las mismas indica que el técnico estaría por la labor de seguir. La duda es si querrá comprometerse ahora, algo que pretende el club, o por contra prefiere seguir esperando por lo que pudiera suceder.