Montaña rusa periquita
Los blanquiazules siguen una jornada más vivos en la pelea por la permanencia
El Espanyol ha vivido una auténtica montaña rusa. Ha pasado de estar hundido a mantenerse vivo en la pelea por la permanencia una jornada más. Los periquitos, que han empatado de forma agónica contra el Atlético de Madrid en casa, siguen penúltimos en la tabla y a tres de la salvación cuando sólo restan seis puntos en juego. Todos son conscientes de que la situación es más que delicada, pero tal y como se ha dado el encuentro, los aficionados aún creen. Despidieron al equipo al grito de sí se puede.
Curiosamente, el cuadro de Luis García ha firmado la mejor primera parte de la temporada y, en cambio, ha recibido el tercer tanto a los pocos segundos de saltar al césped tras el descanso. Fue un golpe muy duro e, incluso, los seguidores pidieron la dimisión de la directiva. Pero el Espanyol logró los goles que se le habían resistido en la primera mitad y empató. Un punto totalmente insuficiente, pero de oro, para los blanquiazules.
El Espanyol llegaba al encuentro a cuatro de la permanencia, tras la victoria del Valladolid contra el Barcelona, y consciente de que sólo le valía ganar en casa. Pero no pudo. Depende de los marcadores de la próxima jornada, podrían bajar.
Seis de seis
El Espanyol, no obstante, tiene claras las cuentas. «Hay que ganar los 6 puntos que quedan»; ha asegurado César Montes tras el partido. «Hubo un momento en el campo que se sintió que nos veníamos abajo pero, cuando nos dan por muertos, levantamos la mano», ha añadido.
El Espanyol se resiste a acompañar al Elche a Segunda. Ahora Valencia, el domingo a las 19.00 horas, dictará sentencia.