Les Grands Buffets, considerado uno de los mejores buffets del mundo, por tan solo 37,90€ adultos (bebidas NO incluidas), niños de 6 a 10 18,90€ y menores de 5 años gratuito, fue el verdadero protagonista del programa MasterChef que sirvió para que mucha gente en España lo situara en el mapa y se animara a viajar hasta Narbonne, descubrir una maravillosa ciudad a la orilla del canal de la Robine, pasear por su calles y descubrir el verdadero arte de vivir, que hace tan particular a esta región del sur de Francia.
¿Pero merece la pena escaparse hasta allí sólo para probar un buffet?
La verdad es que sí. No sólo por la excelente oferta gastronómica, sino porque es una excelente excusa para pasar el día o un fin de semana en Narbonne, una bonita ciudad del sur de Francia a la que, por cierto, desde Barcelona se llega en apenas 2 horas y media (5 horas desde Madrid) gracias a las conexiones internacionales de Renfe-SNCF, y transportarse a un mundo de ilusión y fantasia.
En Les Grands Buffets podremos encontrar todos los clásicos de fiesta de la gastronomía francesa y productos de gran nivel, a un precio relativamente popular, disfrutar del Buffet de quesos mas grande del mundo, y transportarte al siglo XVII con su última obra “La Tente d’Aparat “
Les Grands Buffets es una autentica oda a la gastronomía que te permite degustar una extensa y selecta variedad de mariscos como las Ostras, Bogavantes; 9 variedades de Foie artesanos y el Buffet de Quesos más grande del mundo con más de 110 tipos, una amplia oferta de repostería tradicional con más de 100 variedades elaboradas por un maestro pastelero y una cuidada selección de más de 70 referencias de vinos de la Región servidos en copa o botella a precio de bodega y todo en ello en un ambiente mágico que nos transporta al siglo XVII gracias a su nuevo salón ”La Tente d’Aparat “ – concebida como el testigo de una tienda levantada por Luis XIV en sus jardines – para invitar a la corte a una gran cena con una decoración barroca estilo siglo XVII.
En el lugar se pueden apreciar fabulosas lámparas de araña con lágrimas de cristal (fabricadas por el mismo artesano que suministra al castillo de Chambord), grandes espejos dorados, arcones de marquetería, consolas de madera, candelabros de plata que amenizan la velada con un ambiente aterciopelado a lo « Barry Lindón », todo ello arbolado con limoneros cultivados en las jardineras de los naranjos del jardín del Rey So .