El francés, que volvió a dejar a Europa con la boca abierta, se llevó el MVP y todo lo que le salió al paso.
Havertz, en una jugada brillante al borde del descanso, le dio la ‘Orejona’ a unos ‘blues‘ que dejaron a cero a los de Guardiola de nuevo
N’Golo Kanté acabó sacado a hombros por sus compañeros. No fue para menos. El Chelsea se proclamó campeón de Europa por segunda vez en su historia, con Thomas Tuchel en el banquillo y el futbolista francés en todo el campo en el amplio sentido de la palabra.
N’Golo volvió a estar omnipresente y sólo le faltó escribir el nombre de su equipo en la copa de las orejas, que a lo mejor también lo hizo. El ‘7 blue’ maravilló al mundo del fútbol otra vez y Europa volvió a hacerse la misma pregunta: ¿con cuántos ‘Kantés’ juega el Chelsea?
N’Golo Kanté acabó sacado a hombros por sus compañeros. No fue para menos. El Chelsea se proclamó campeón de Europa por segunda vez en su historia, con Thomas Tuchel en el banquillo y el futbolista francés en todo el campo en el amplio sentido de la palabra.
N’Golo volvió a estar omnipresente y sólo le faltó escribir el nombre de su equipo en la copa de las orejas, que a lo mejor también lo hizo. El ‘7 blue’ maravilló al mundo del fútbol otra vez y Europa volvió a hacerse la misma pregunta: ¿con cuántos ‘Kantés’ juega el Chelsea?
Como era previsible, Kanté se llevó el MVP. Recorrió 12 kilómetros por el césped de O Dragao, el que más. Dio 34 pases, 29 de ellos buenos, lo que supone un 85% de acierto, teniendo en cuenta que también arriesga con ellos cuando traspasa su campo. Tocó 53 veces el balón y robó hasta 10 pelotas sin hacer ninguna falta a sus rivales, que verán su figura en sueños y durante mucho tiempo. Ganador de casi todos los duelos, lo de N’Golo fue un ‘Kanteo’.