Aunque el Barcelona tenía la esperanza de poder recibir a un grupo reducido de aficionados en su estadio para el estreno en Champions League, la semana que viene contra el Ferencvaros, no va a poder ser. Así lo han confirmado hoy mismo desde la Generalitat de Catalunya.
La consellera de Salut, Alba Vergés, y el secretario de Salut de la Generalitat, Josep Maria Argimon, descartaron esa posibilidad esta mañana en RAC1. «En estos momento no sería partidario. Me costaría explicar determinadas medidas que hemos tomado y tener que abrir ahora el Camp Nou para 1.000 personas, pese a que en el Camp Nou pueden mantener la distancia perfectamente. Es más la entrada y la salida del campo. No sería la imagen que yo desearía», indicó Argimon. Y es que hay que tener en cuenta que el gobierno autonómico catalán acaba de decretar el cierre de bares y restaurantes durante los próximos 15 días.
No obstante, Vergés no cerró la puerta a que haya público más adelante, en otro momento de la temporada y de la pandemia. En la situación actual, es muy difícil que nos planteemos que pueda haber público. No podemos aventurarnos que sea así para toda la temporada, pero de cara al 20 de octubre, imposible», explicó.
El voto de censura
En cuanto a la celebración del voto de censura y la posibilidad de que la Generalitat lo impida por la pandemia, Vergés y Argimon aseguraron que todavía no han recibido petición del Barça al respecto, aunque dejaron caer su opinión. «La respuesta sería no si comporta aglomeración y no es de forma escalonada», advirtió Argimon.