La etapa de Xavi Hernández como entrenador del FC. Barcelona ha llegado a su fin, y lo cierto es que lo ha hecho de una forma un poco abrupta, con la grada pidiendo desde hace meses el cese del canterano y con la directiva dando bandazos inexplicables en sus decisiones.
Como sucesores de Xavi han sonado diversos entrenadores y los nombres que sonaban como pronósticos fiables de quiniela eran muchos, como por ejemplo, Marcelo Gallardo, actual entrenador de River, Xavi Alonso que se ha marcado una temporada histórica con el Bayer Leverkusen (solo le ha faltado culminarla con un título europeo, pero acabo cayendo en la final de la UEFA Europa League por un claro y rotundo 3 – 0 ante el Atalanta).
Han sonado también ilustres ex – entrenadores del club como Luis Enrique y el gran Pep Guardiola, pero lo cierto es que al final la junta directiva ha decidido dar las riendas del FC. Barcelona a Hansi Flick.
Hansi Flick
Si miramos la historia de Hansi Flick veremos que como futbolista no tuvo una carrera demasiado destacada, y eso que vistió la camiseta del FC Köln y del Bayern de Múnich, pero si miramos su etapa como entrenador veremos que ahí sí ha destacado bastante más.
Hansi Flick fue asistente de la selección alemana que gano el Mundial de 2014, y luego como entrenador principal consiguió que el Bayern de Múnich igualara una gesta que solo había realizado un equipo y un entrenador, en concreto el Barça de Pep Guardiola, y esa gesta fue la de conquistar el sextete, algo que consiguió en 2019 dirigiendo al Bayern de Múnich.
La temporada 2019 – 2020 dirigió al conjunto muniqués que conquisto la Bundesliga, la Copa Alemana, la Supercopa de Alemania, La Champions League, la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes.
Todavía se recuerda en el Camp Nou, el meneo táctico y físico que infringió el conjunto de Baviera (con Hansi Flick de entrenador) al Barça, al que le endoso un escandaloso 2 – 8 que dejo al club blaugrana humillado.
Los retos de Hansi Flick en su nueva etapa blaugrana
Es evidente que el juego del conjunto blaugrana ha ido en los últimos años, de mal en peor, incluso ha habido voces internas que criticaban que se entrenaba poco, y lo cierto es que viendo los partidos era más que evidente que la puesta a punto a nivel físico del conjunto de la ciudad Condal era, como mínimo, deficiente.
Hans-Dieter Flick tiene ante sí un reto enorme, devolver al Barça a una elite deportiva de la que jamás debería haber salido, y para ello va a tener que afrontar retos importantes:
- Renovar el estilo de juego: Es más que evidente que el Barça ha perdido su identidad futbolística en los últimos años. Flick tendrá que o bien recuperar la esencia del juego de toque y posesión que caracterizó al club durante la era Guardiola, o apostar por un juego más físico, lo cierto es que algunos aspectos de la forma de jugar de los equipos de Flick si tienen eso que llaman ADN Barça, como la presión alta, la posesión del balón, pero en otros aspectos es bastante diferente, como por ejemplo a Flick le gusta jugar con los extremos, le da menos importancia al juego de posición.
- Reconstruir el equipo: La plantilla del Barça está envejecida y necesita una profunda renovación. Flick tendrá que tomar decisiones difíciles y deshacerse de algunos jugadores emblemáticos para dar paso a jóvenes promesas. Es importante que el nuevo proyecto tenga una base sólida para el futuro, lo cierto es que esta temporada hemos visto como algunos jóvenes han dado un paso adelante, como por ejemplo Cubarsi, Alejandro Balde, Fermín López o Héctor Fort, aparte Flick podrá contar con Gavi que ha estado lesionado y veremos si por fin podemos disfrutar de un año de Pedri sin lesiones.
- Reducir la masa salarial: La delicadísima situación económica del club va a obligar a Flick a ser austero en el mercado de fichajes. Deberá buscar jugadores de calidad a bajo precio o apostar por la cantera. La reducción de la masa salarial es fundamental para la sostenibilidad del club a largo plazo, es por ello que ahora mismo jugadores que parecían tener casi asegurada la renovación, como Sergi Roberto, se ven ahora en el alero.
- Gestionar un vestuario de egos: El vestuario del Barça está plagado de estrellas. Flick tendrá que demostrar su capacidad de liderazgo y diplomacia para gestionar a los jugadores y crear un buen ambiente en el vestuario. La unidad del grupo será clave para el éxito del equipo.
- Ganar títulos: La afición del Barça no entiende de años de transición, es más, el aficionado blaugrana exige resultados. Flick tendrá que ganar títulos para contentarla y consolidarse como un entrenador de primer nivel.
- Adaptarse a la cultura del club: El FC Barcelona es un club con una cultura y una filosofía únicas y porque no decirlo, peculiares. Flick tendrá que adaptarse a esta idiosincrasia y entender los valores del club para poder ganarse el respeto de la afición y del entorno, un entorno que no olvidemos puede llegar a ser terriblemente tóxico.
- Gestionar la presión mediática: El FC Barcelona es uno de los clubes más mediáticos del mundo. Flick tendrá que aprender a lidiar y convivir con la presión de la prensa y los aficionados.
- Construir un proyecto a largo plazo: El Barça necesita un proyecto sólido y sostenible para volver a ser uno de los mejores clubes del mundo. Flick tendrá que trabajar en colaboración con la directiva para construir un equipo competitivo y con futuro, con el hándicap de que la culerada tiene muy poca paciencia y exige resultados desde el día 1.
Hansi Flick es la apuesta del FC Barcelona, con él se espera que el club vuelva a donde debería estar por historia, y con él se espera que dejemos de ver un equipo que físicamente va siempre corto de fondo, talento para jugar un buen futbol lo tiene, si consigue poner a los jugadores, en forma, y consigue hacerles entender que quiere de ellos, conseguirá muchos éxitos, eso sí, la culerada deberá tener algo que históricamente, jamás ha tenido, y eso es paciencia.
De momento, Hansi Flick ha firmado un contrato por dos temporadas con el conjunto blaugrana, veremos si en este tiempo es capaz de llevar al Barça a lo más alto, o si se queda por el camino, su gran problema será, sin duda alguna, el famoso entorno blaugrana, que no solo exige ganar, sino que exige hacerlo de una forma muy determinada.