El fútbol, o mejor dicho Messi, dio algo de tregua a una semana más que tensa en Can Barça. La pañolada y los gritos de ‘Bartomeu, dimisión‘ que recibieron los inquilinos del palco antes del pitido inicial dejaron clara la postura de la grada. El presidente constató que no le perdonan tanto derrape en plena temporada. Pero una vez empezó el partido -con algo de retraso por un problema de comunicación con la sala VOR, todo volvió a la calma gracias al excelso partido del astro argentino. El Barça recibía a un Eibar que llegaba al Camp Nou como víctima propiciatoria antes del importante doble enfrentamiento que tendrán que afrontar esta semana visitando Nápoles en Champions y el Bernabéu en el Clásico del 1 de marzo.
El Eibar se rinde públicamente a Messi: «No nos queda otra que ponernos en pie»
Mendilibar planteó presión alta de inicio -algo que se está convirtiendo en un fijo en los rivales para complicar el juego de toque del Barça- ante el 4-4-2 que puso Setién dando descanso a De Jong y con un centro del campo formado por Rakitic, Arthur, Busquets y Arturo Vidal. Los armeros tuvieron un buen arranque de partido. Escalante a los dos minutos puso a prueba a Ter Stegen y un minuto después Sergi Enrich marcó, pero estaba en fuera de juego. Pero el buen inicio guipuzcoano duró 13 minutos. Hasta que apareció Messi.
El argentino acabó con su sequía de cuatro partidos en Liga sin marcar (398 minutos) con un auténtico golazo que dio pie a su posterior recital. Leo se internó en el área haciendo un caño a Arbilla, evitó la entrada de Diop en su carrera hacia la meta y cruzó ante Demitrovic en su salida. Este gol le dio carrerilla, por si había dudas, y se fue al descanso con un hat-trick en su haber. El segundo fue muy suyo yéndose de tres rivales y el tercero lo tuvo más fácil al recoger un rechace de Arbilla. Está claro que se le da bien el Eibar: 20 goles le ha marcado en 11 partidos. Al descanso se llevó una ovación de una grada que le adora. El presidente azulgrana en el césped mandó otro aviso al palco de cómo se tienen que hacer las cosas para evitar problemas.
En la segunda mitad, con Braithwaite calentando en la banda, salió mucho mejor el Eibar. Busquets salvó un gol de Escalante desviando a córner. Cote también tuvo una buena opción en una falta que despejó Ter Stegen. Inui tuvo a su vez un par de ocasiones y hasta De Blasis puso a prueba a Ter Stegen. Los armeros marcaron otro gol, pero hubo falta de Arbilla sobre Piqué. En pocos partidos en esta Liga habrán rematado tanto a puerta los de Mendilibar. Pero ni por esas pudieron con Ter Stegen.
Buen debut de Braithwaite
A falta de 20 minutos se produjo el debut de Braithwaite saliendo en lugar de Griezmann. Y el danés salió como una fiera al campo. El ex del Leganés tiene unas ganas locas de hacerlo bien después de lo discutido de su fichaje. No marcó pero dio las asistencias del cuarto y del quinto gol azulgrana. Primero a Messi para que Leo hiciera un póker y después a Arthur tras despejar Dmitrovic su disparo. No vieron tarjeta amarilla Lenglet y Umtiti por lo que estarán en el Clásico. Victoria plácida del Barcelona, la más tranquila de la era Setién, antes de viajar a Nápoles y visitar el Bernabéu, donde una victoria tranquilizaría mucho más las movidas de los azulgranas fuera del césped.