El Girona jugará la Champions en Montilivi
El Girona, quizás empujado por sus aficionados, y hasta por el propio Míchel Sánchez, que en la previa ante el Alavés dijo que «no contemplo otro lugar para jugar la Champions que no sea Montilivi», ha apostado por el romanticismo y también la cordura y el premio para los suyos ante ingresos extraordinarios.
El Girona jugará en Girona. Montilivi será el escenario de, como mínimo, cuatro partidos de la fase de grupos de la máxima competición continental. Los abonados blanquirrojos, que ya saben que no van a caber dentro del campo -la entidad estima que en los partidos podrán entrar entre 6.500 y 7.000 abonados-, podrán ver en su casa a los mejores equipos de Europa después de completar una campaña de sueño.
Falta por ver la fórmula que empleará el club para satisfacer al máximo de sus aficionados -se informará en breve-, si por sorteo cada partido o un carnet especial para la competición siguiendo orden de antigüedad, por poner ejemplos.
Para hacer posible todo esto, el Girona invertirá cerca del millón de euros en habilitar el estadio y contentar a la UEFA con las obligaciones que presenta a los equipos para que en sus estadios alberguen partidos de la más alta competición. Cumplir con los compromisos VIP de la UEFA, habilitar zonas de prensa y de trabajo amplios para acoger a la prensa local y extranjera, zonas de aparcamientos para autocares, entre otros, y accesos independientes para las aficiones rivales son algunos de los requisitos que se superaran con la inversión prevista.
El Girona dejará de ingresar unos cuantos millones de euros quedándose en casa y descartando un traslado a Barcelona. Para los abonados y más fieles del equipo, el valor de ver a los suyos en Montilivi será incalculable.