No tienen a Stephen Curry. Tampoco a Klay Thompson. Y mediáticamente no es lo mismo la Liga ACB que la NBA. Valencia Basket (18-0) se mantiene invicto en este arranque de temporada sumando competición europea y ACB. Su racha es espectacular a la vez que sorprendente. El equipo que dirige el catalán Pedro Martínez, con hasta siete caras nuevas en la plantilla, combina a la perfección un equilibrio difícil de lograr debido a un calendario demasiado exigente. Rafa Martínez y Fernando San Emeterio aportan experiencia y solidez en los momentos clave. Guillem Vives y Sam Van Rossom mezclan visión de juego y acierto a partes iguales. Y Justin Hamilton (revelación en este inicio) y Luke Sikma se reparten puntos, rebotes y minutos en un juego interior muy poderoso. Junto a ellos, el montenegrino Bojan Dubljevic se comporta como uno de los líderes naturales del equipo en su tercera campaña en el equipo de la capital del Turia. Dubljevic (casi 13 puntos y más de 6 rebotes por partido) quiere más y no se conforma con esta magnífica puesta en escena. Ganaron en Madrid, derrotaron a Laboral Kutxa y, hasta la fecha, nadie es capaz de plantar cara a un Valencia Basket lanzado. Con un buen entrenador y una planificación digna de aplaudir, la ciudad disfruta de un conjunto que ilusiona y sueña con realizar grandes gestas.